V Edición Vela Clásica del Mar Menor
Tras cinco años que no se celebraba el 2018 este año las velas clásicas han vuelto al Mar Menor. Con una importante participación de alrededor de 30 embarcaciones de vela latina y 7 en la categoría de clásicas. Entre los latinos se congregaron barcos venidos del País Vasco, Galicia, Valencia, Torrevieja y la flota de Santa Lucia y el Mar Menor. Estos estuvieron expuesto en el muelle pesquero de Lo Pagan e hicieron las delicias con sus maniobras y bella estampa de los bañistas de las playas de Lo Pagan y Santiago de la Ribera. Mientras en el Puerto Tomás Maestre se daban cita los grandes clásicos. Encabezados por el Saint Christophe de 1934 diseñado por el francés Victor Brix y de 20 metros de eslora o el bellísimo Gipsy de 1927 y11, 90 m del conocido arquitecto naval Colin Archer. Una historia apasionante la de este velero que se construyó en los astilleros Echevarrieta y Larrinaga de Cádiz siendo el único barco que se construyó en el astillero de uso eminentemente militar. Encargado tras la finalización del Juan Sebastián El Cano por encargo del propietario Señor Echevarrieta. Tras una historia apasionante de intrigas durante la Guerra Civil la familia Rubio lo adquirió en 1951 y desde entonces disfruta de un mantenido mimo en su dilatada carrera. Es ganador de los trofeos más importantes de vela clásica en el Mediterráneo. El estiloso Kasuje de construcción británica, el Caroline, el Bonaventura, Else o el Cid que compitieron el sábado y el domingo en un largo recorrido de 12 millas desde la bocana de Puerto Tomás Maestre y pasando entre la Isla del Barón y La Perdigera tomada por estribor a un tramo en Los Urrutias y a una boya en Los Alcázares y vuelta a la salida. Un espectáculo de las grandes velas que se pudieron ver en todo el Mar Menor.
Cartagena 2012
La IV edición supuso un nuevo reto. El cambio de sede del Mar Menor a Cartagena, permitía contar con una ciudad volcada con la organización y unas instalaciones deportivas de primer orden. Con una participación algo más baja que años anteriores, alrededor de 30 barcos, entre clásicos y latinos se dieron cita durante la semana. Aunque las condiciones meteorológicas no acompañaron, se pudieron celebrar varias pruebas, dentro de la dársena del puerto. Un Village en el centro del mismo, hicieron realmente más cómoda la estancia de los participantes. Cartagena se convierte así en la sede ideal para la realización de este evento que año a año se consolida.
El Despliegue de velas 2011
Esta última edición se ha convertido en el sueño cumplido de los organizadores y en la constatación de la dimensión adquirida de La Semana Náutica del Mar Menor.
La llegada a nuestras aguas del Hispania, el Lady Anne, Sadko, Adix o Sunshine nos ofreció la oportunidad de montar un segundo Village en el Puerto Deportivo Tomás Maestre.
El acceso a la laguna con calado suficiente en el canal, aumentó la posibilidad de crecimiento de La Semana Náutica. Esto ha permitido ver por primera vez al Hispania navegar tras más de sesenta años en dique seco y sobre todo ofrecernos un grandioso espectáculo en su macht race par cular contra el Lady Anne. Dos veleros inigualables que junto al resto de la flota y en dos campos de regatas diferentes, llenaron el Mar Menor de velas clásicas, rodeándolo de elegancia, clase y tradición.
La Consolidación 2010
A esta cita repitieron todos los barcos de la primera edición más nuevas incorporaciones venidas de otros puertos y con la recuperación de latinos de 42 palmos que estaban en proceso de restauración. La Volaora, el Joven Pablo o La Mobby Dick encandilaron a todos. Una vez más el Village en Lo Pagan reunió una importante representación del Turismo de la Región en diferentes stands así como la incorporación de otros como Arqua, la Universidad Politécnica de Cartagena o el Instituto Oceanográfico que hizo las delicias de los más pequeños con un acuario con caballitos de mar. Una gran semana de regatas y un éxito de participación.
h
Un reto clásico 2009
Esta primera edición supero todas las expectativas marcadas por los impulsores, con la asistencia en el Puerto de Lo Pagan de más de 50 barcos entre latinos y clásicos. Latinos venidos de Valencia, Alicante, Torrevieja y Murcia se dieron cita junto a veleros como La Bella Lola, Jennifer, Azagra que no pudieron estar atracados en el muelle por falta de calado. Pero nos aportaron el empaque de su belleza y su destreza marinera. Un Village que acogió los mejores exponentes regionales asi como una exposición de utensilios y fotografías antiguas de gran sabor marinero. Esto unido a la festividad de la Virgen del Carmen hizo que esta primera cita fuera seguida por un número muy importante de visitantes. Una gran cobertura mediática contribuyó al lanzamiento y a su difusión.